CafialamafiaProd ♪
Lyrics: KDM
Producción: Rudeskillz Beatz
En el pasado yo quise ser pájaro, volar muy alto y un cielo nublado truncó mi sueño, lluvia sobre el prado. Plegué mis alas, viví resguardado bajo un arbol y la fría tormenta me alejó del mundo, pero no olvidé el cielo. Hoy vivo refugiado en tu tejado, en tu cabeza me he instalado. Con cada nuevo canto de la mía escapo. Y la locura me quiso atrapar. No lo pongo en duda. Hoy puedo llegar donde ninguno antes estuvo ya. Más allá de la mentira, es mi nueva realidad. Y no es la fábula ni un burro que toca una flauta. Traigo cada registro, yo marco la pauta. Caminé el lado oscuro de la ciudad vetusta. En la garganta un nudo. En el bolsillo ni un duro. Se como gastarlo todo. Yo no se de otro modo. Apuesto al negro y rojo sangre todo. Por la mañana lloro después de dormir solo, tras olvidarlo todo. Mi alma negra en duelo. Yo, sombra y sólo muero. Pero hoy hay otro cielo. He visto un mundo nuevo, he vomitado aquello. Hace hoy un día bello, lo he ensayado yo. Ya no me ensaño, bro. Y venticinco ya en cada pata, ja!. Nada lo va a parar. Se fuga del lugar como una luz fugaz, garra de ave rapaz. Afilada y voraz. La presa tiesa ya. Ves su pico afilar, águila, no alcatraz. Sí. Y cada día es un día más, una ventana más allá. Un pulmón abierto y aire puro y limpio para respirar. Cada palabra cobra vida y ¿por qué será?, será porque un día quisimos cambiar, hacer un mundo a la medida de mi realidad, dejar aparte aquel pasado de orgullo y maldad. Si caminé por el abismo y me atreví a saltar y abajo me miré a mi mismo. Me volví a encontrar y me vi tan desfigurado que me eché a temblar. Hoy sigo mi camino sin dejar de olvidar aquella pose malograda de una realidad. Una vida atrapada en la fealdad. Por aquí no dejan de pasar coches, yo no dejo cantar. Parece la Castellana, mi teatro a rebosar.
En el pasado yo quise ser pájaro, volar muy alto y un cielo nublado truncó mi sueño, lluvia sobre el prado. Plegué mis alas, viví resguardado bajo un arbol y la fría tormenta me aisló del mundo, pero no olvidé el cielo. Hoy vivo refugiado en tu tejado, en tu cabeza me he instalado. Con cada nuevo canto de la mia me escapo. Y la locura me quiso atrapar. Y no lo pongo en duda. Hoy puedo llegar donde ninguno antes ha estado ya.
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